Tras la pandemia, todos nos encontramos ante un nuevo escenario donde nos hemos tenido que adaptar a las nuevas circunstancias marcadas por la distancia de seguridad e higiene.
En este sentido, Forum Business Travel y Diners Club han elaborado el informe “Una nueva etapa en los eventos de empresa” donde ha destacado el papel de la industria MICE, presente y futuro.
A nivel económico la industria MICE alcanzó en el año 2019 los 12.314 millones de euros en España, una cifra muy por encima de lo que se produjo en 2020, con apenas 3.179 millones. El año pasado, en 2021, vimos una recuperación con 5.079 millones, suponiendo esto un incremento del 60% con respecto al ejercicio anterior.
Los verdaderos niveles de recuperación nos los veremos hasta el segundo trimestre de 2024 según el último estudio de Spain Convention Bureau en colaboración con la consultora Brain Trust.
Podemos decir que poco a poco el sector MICE “toma velocidad de crucero”.
Este nuevo escenario ha cambiado la mentalidad de los profesionales del sector sintiéndose ahora mucho más seguro y mejor equipados que antes de la pandemia. Las reuniones ya no se planifican de la misma manera y los eventos ahora tienen incluso más calidad porque hay que estar atentos a cualquier imprevisto. Es más “la mayoría afirma que habrá un incremento de los presupuestos y de los desplazamientos”.
Lo que para muchos ha sido un retroceso para otros ha sido un “acelerador de algunos procesos a los que ya se enfrentaba el sector MICE”. Por ejemplo, podemos destacar la forma tan rápida en que ha evolucionado las tecnologías y la digitalización además de poner sobre la mesa aspectos tan importantes como la comunicación, promoción y gestión.
Otro aspecto a tener en cuenta ha sido la necesidad de crear eventos más sostenibles de acuerdo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
No obstante, no debemos relajarnos y debemos seguir prestando atención a la seguridad sanitaria y a la flexibilidad para “con los clientes si queremos recuperar la actividad presencial”. Asimismo, los empresarios han salido bastante perjudicados de la pandemia y es importante apoyarlos con acciones como la simplificación de la burocracia para poder reactivar el negocio.
¿Qué factores influyen en la recuperación?
Para una rápida (y al mismo tiempo lenta) recuperación del sector MICE debemos tener en cuenta, según el informe, los siguientes aspectos: medidas sanitarias a corto, medio y largo plazo; previsiones económicas; capacidad de adaptación del sector MICE a diferentes situaciones; nuevos hábitos de los viajeros del sector MICE; incertidumbre ante la falta de datos.
Volver a los niveles económicos de antes de la pandemia no es tarea fácil pues anteriormente el turista de negocios gastaba en torno a los 315-320 € de gasto medio diario. En 2021 hubo un descenso del 13%. Sin embargo, en el último año, un turista que viaja por trabaja ha triplicado a uno que viajaba por ocio en el último año. De ahí, que podamos predecir que los niveles prepandemia no volveremos a verlos hasta el año 2024.
¿Cómo es la industria del sector MICE en España?
Si tuviéramos que coger algunos adjetivos podríamos escoger los siguientes: optimismo; resiliencia; flexibilidad con los clientes; fortaleza de la marca España; sector profesionalizado, entre otros.
Si bien todos estos adjetivos denotan esperanza, es preciso tener en cuenta tanto las debilidades como las amenazas que sufre el sector, como si de un DAFO se tratara:
Debilidades: exceso de burocracia; poca segmentación en la demanda; ausencia de datos para analizar; más focalización en el producto que en la experiencia-cliente.
Amenazas: alargamiento de la pandemia; restricciones de movilidad; aumento de competencia; falta de colaboración público-privada.
De cara al futuro
Todos sabemos que tras la pandemia ha habido un antes y un después no solo en el sector MICE sino en todos los sectores. Han cambiado los escenarios, las herramientas y por supuesto las personas, nosotros mismos. Sin olvidarnos de la seguridad, vamos a destacar cuáles serán las tendencias que nos esperan en este sector.
Bienestar emocional: si antes era importante hoy día lo es mucho más. Es importante adaptar el evento al cliente poniéndole en el centro. Los eventos deben emocionar al cliente y adecuarse a sus necesidades.
Diversidad, igualdad e inclusión: queremos diversidad e igualdad para asistentes y proveedores. Tanto por un lado como por el otro, los seleccionados deben tener en cuenta aspectos que incluyan a las minorías, a las mujeres o que cuenten con una perspectiva social.
Eventos sostenibles: no existe evento sin sostenibilidad. La responsabilidad es parte de todos, tanto de asistentes como de empresas responsables. No tenemos que prescindir de los eventos presenciales para contar con eventos sostenibles, hay muchos aspectos que contribuyen a desarrollar un evento sostenible: iluminación, sonido, comida, regalos para asistentes.
Eventos híbridos Vs presenciales: es preciso buscar el equilibrio entre los eventos híbridos y presenciales. Gracias al desarrollo de la tecnología hemos podido asistir al trabajo en formato online, hemos acudido a congresos virtuales y nuestros hijos han podido continuar con sus clases de manera virtual. No se trata de abandonar toda la tecnología ahora que volvemos a recuperarnos sino de usarla en beneficio de todos.
Eventos eficaces: es importante que nos marquemos unos objetivos y una planificación antes, durante y después del evento. Evaluar y medir el retorno de inversión (ROI) es tarea primordial para cualquier organizar de eventos.